Gribaldi & Salvia se fundó en 1942 y comenzó su andadura reparando antiguos vehículos segadores de tracción animal. Con la evolución de la mecanización agrícola, los fundadores de la empresa iniciaron también la producción de segadoras completas aplicadas lateralmente al tractor, así como de componentes para otros constructores, con especial referencia al sector de las "guardas dobles", que todavía hoy representa una de las líneas de productos específicas de Gribaldi & Salvia. En los últimos años, una política orientada a las inversiones continuas ha permitido a Gribaldi & Salvia ampliar la superficie de la empresa hasta los 39.000 m2 actuales y actualizar continuamente su gama de máquinas, permitiéndole ofrecer productos cada vez más avanzados en términos de tecnología y calidad. Tanto el dentado como la salida de las segadoras se realizan íntegramente en el interior. Las fases de prensado, tratamiento térmico y carpintería, así como los procesos mecánicos y de pintura, se llevan a cabo mediante maquinaria y sistemas de alta tecnología, sometidos constantemente a estrictos ciclos de mantenimiento.