La industria manufacturera estadounidense sigue enfrentándose a una serie de retos que limitan su rendimiento.
El gasto en bienes de capital y la inversión en equipos y maquinaria languidecen desde hace varios años, lo que se refleja en los niveles de producción y productividad, que también se han estancado.
La continua fortaleza del dólar frente a las principales divisas del mundo hace estragos en las empresas manufactureras estadounidenses que intentan mantener precios competitivos en un mercado cada vez más global, al igual que unos tipos de interés relativamente altos, o al menos más altos que la relajación cuantitativa de hace unos años.
Luego están las reverberaciones e incertidumbres creadas por el Brexit y la preocupación por las tensiones geopolíticas y sus repercusiones en los mercados mundiales.
La Alianza de Fabricantes para la Productividad y la Innovación (MAPI) prevé un crecimiento relativamente modesto de la producción manufacturera en Estados Unidos. Mientras que se estima que el crecimiento anual del PIB estadounidense será del 2,3 % de media entre 2017 y 2020, se espera que el crecimiento de la producción manufacturera sea del 1,5 % de media durante el mismo periodo.
Las previsiones para la producción de hierro y acero, los principales sectores de la industria manufacturera estadounidense, aunque han mejorado con respecto a hace unos años, indican un crecimiento lento.
En este contexto, en 2016, las importaciones totales de EE.UU. para los 15 sectores principales de Machines Italia disminuyeron un 5,65%, hasta 47.700 millones de euros. En cuanto a las importaciones estadounidenses de las principales categorías de bienes de capital, hubo una disminución en los componentes hidráulicos, neumáticos y de transmisión (8,1%), maquinaria de movimiento de tierras (13,9%), maquinaria agrícola (11,8%), maquinaria metalúrgica (7,8%), maquinaria textil (6%), maquinaria de procesamiento de vidrio (34,2%), maquinaria de curtido (12,4%) y maquinaria del sector metalúrgico (11,4%).
Por el contrario, aumentan las máquinas para la transformación del mármol (0,8%), las máquinas para la transformación del plástico y el caucho (2,2%), las máquinas para la transformación de alimentos (11%), las máquinas para la industria gráfica y papelera (8,2%), las máquinas de embalaje (12,8%), las máquinas para la transformación de la madera (11,1%) y las máquinas para la industria cerámica (26,3%).
Casi el 60% de las importaciones estadounidenses de bienes de equipo son componentes hidráulicos, neumáticos y de transmisión (32,4%), maquinaria para movimiento de tierras y construcción (13,4%) y maquinaria agrícola (11,1%).
En 2016, las importaciones estadounidenses de mecánica instrumental made-in-Italy crecieron un 3,11%, el mejor comportamiento de los 10 principales socios comerciales de Estados Unidos. Italia vuelve a confirmarse como el sexto proveedor estadounidense de maquinaria y tecnología instrumental - 15 sectores proyectan Machines Italia , con 3.000 millones de euros exportados en 2016 y una cuota de mercado superior al 6% (+ 3,11% en comparación con 2015). Por delante de Italia se sitúan, por este orden, Japón, Alemania, China, Canadá y México, seguidos de Corea del Sur, Reino Unido, Francia y Taiwán.
Se observa un aumento para la maquinaria de la industria de la impresión y el papel (42,9%), maquinaria de procesamiento de mármol (41,2%), maquinaria de cerámica (31,5%), maquinaria de procesamiento de vidrio (31,3%), maquinaria de movimiento de tierras y construcción (25,9%), maquinaria para trabajar la madera (21,2%), maquinaria de la industria alimentaria (12%) y maquinaria de envasado (8,1%).
Sólo siete de los quince sectores de Machines Italia registraron retrocesos: maquinaria agrícola (10,7%), componentes (8,4%), maquinaria textil (5,3%), maquinaria para la industria metalúrgica (2,2%), máquinas-herramienta para la industria metalúrgica (2,2%), maquinaria para la industria del curtido (0,9%) y maquinaria para la transformación del plástico y el caucho (0,7%).
El gasto en bienes de capital y la inversión en equipos y maquinaria languidecen desde hace varios años, lo que se refleja en los niveles de producción y productividad, que también se han estancado.
La continua fortaleza del dólar frente a las principales divisas del mundo hace estragos en las empresas manufactureras estadounidenses que intentan mantener precios competitivos en un mercado cada vez más global, al igual que unos tipos de interés relativamente altos, o al menos más altos que la relajación cuantitativa de hace unos años.
Luego están las reverberaciones e incertidumbres creadas por el Brexit y la preocupación por las tensiones geopolíticas y sus repercusiones en los mercados mundiales.
La Alianza de Fabricantes para la Productividad y la Innovación (MAPI) prevé un crecimiento relativamente modesto de la producción manufacturera en Estados Unidos. Mientras que se estima que el crecimiento anual del PIB estadounidense será del 2,3 % de media entre 2017 y 2020, se espera que el crecimiento de la producción manufacturera sea del 1,5 % de media durante el mismo periodo.
Las previsiones para la producción de hierro y acero, los principales sectores de la industria manufacturera estadounidense, aunque han mejorado con respecto a hace unos años, indican un crecimiento lento.
En este contexto, en 2016, las importaciones totales de EE.UU. para los 15 sectores principales de Machines Italia disminuyeron un 5,65%, hasta 47.700 millones de euros. En cuanto a las importaciones estadounidenses de las principales categorías de bienes de capital, hubo una disminución en los componentes hidráulicos, neumáticos y de transmisión (8,1%), maquinaria de movimiento de tierras (13,9%), maquinaria agrícola (11,8%), maquinaria metalúrgica (7,8%), maquinaria textil (6%), maquinaria de procesamiento de vidrio (34,2%), maquinaria de curtido (12,4%) y maquinaria del sector metalúrgico (11,4%).
Por el contrario, aumentan las máquinas para la transformación del mármol (0,8%), las máquinas para la transformación del plástico y el caucho (2,2%), las máquinas para la transformación de alimentos (11%), las máquinas para la industria gráfica y papelera (8,2%), las máquinas de embalaje (12,8%), las máquinas para la transformación de la madera (11,1%) y las máquinas para la industria cerámica (26,3%).
Casi el 60% de las importaciones estadounidenses de bienes de equipo son componentes hidráulicos, neumáticos y de transmisión (32,4%), maquinaria para movimiento de tierras y construcción (13,4%) y maquinaria agrícola (11,1%).
En 2016, las importaciones estadounidenses de mecánica instrumental made-in-Italy crecieron un 3,11%, el mejor comportamiento de los 10 principales socios comerciales de Estados Unidos. Italia vuelve a confirmarse como el sexto proveedor estadounidense de maquinaria y tecnología instrumental - 15 sectores proyectan Machines Italia , con 3.000 millones de euros exportados en 2016 y una cuota de mercado superior al 6% (+ 3,11% en comparación con 2015). Por delante de Italia se sitúan, por este orden, Japón, Alemania, China, Canadá y México, seguidos de Corea del Sur, Reino Unido, Francia y Taiwán.
Se observa un aumento para la maquinaria de la industria de la impresión y el papel (42,9%), maquinaria de procesamiento de mármol (41,2%), maquinaria de cerámica (31,5%), maquinaria de procesamiento de vidrio (31,3%), maquinaria de movimiento de tierras y construcción (25,9%), maquinaria para trabajar la madera (21,2%), maquinaria de la industria alimentaria (12%) y maquinaria de envasado (8,1%).
Sólo siete de los quince sectores de Machines Italia registraron retrocesos: maquinaria agrícola (10,7%), componentes (8,4%), maquinaria textil (5,3%), maquinaria para la industria metalúrgica (2,2%), máquinas-herramienta para la industria metalúrgica (2,2%), maquinaria para la industria del curtido (0,9%) y maquinaria para la transformación del plástico y el caucho (0,7%).