Pasar al contenido principal
Compartir
Print Friendly and PDF
ROBÓTICA, NUEVA TENDENCIA EN LA ECONOMÍA CIRCULAR

La Cuarta Revolución Industrial ha introducido tecnologías avanzadas como la analítica de datos, la realidad aumentada y la conectividad transparente, que aumentan y empoderan a los operadores humanos. En fábricas inteligentes, estas tecnologías trabajan de la mano con operadores altamente calificados para aumentar la productividad y gestionar la planta en tiempo real.

La transformación digital se basa en la conectividad y la colaboración. La integración de productos, máquinas y personas, junto con la colaboración a lo largo de toda la cadena de valor industrial, son factores habilitadores esenciales de la digitalización.

Los robots en la fabricación representan una gran oportunidad para mejorar el consumo energético y de recursos, desde la electrónica al sector agroalimentario, las posibles aplicaciones de la robótica que ayudarán a acelerar la transición hacia la economía circular

 

La robótica ofrece optimización de procesos industriales, eficiencia energética y soluciones de movilidad más limpia. Y se está expandiendo en el campo de la fabricación y de la gestión de residuos.

 

Entre los principales efectos con los que la robótica ha impactado en la economía circular se encuentran:

 

  • Reducción del 30% en la generación de residuos electrónicos
  • Aumento del 25% en la reutilización de componentes: La precisión de la robótica integrada permite una mayor recuperación de componentes reutilizables.
  • Eficiencia en el proceso de desensamble: Los robots pueden desensamblar dispositivos hasta un 40% más rápido que los métodos tradicionales.

De acuerdo con la experta en economía circular, Guadalupe García, la automatización dispara el uso de robots en cada vez más aplicaciones, lo que mejora el rendimiento, aumenta la vida útil del producto y reduce el desperdicio. Aplicados al reciclado, los robots pueden distinguir entre cientos de residuos y recuperar aquellos reciclables o valiosos.

 

RoCycle, IRBIN o Daisy son algunos de los asistentes que han llegado del presente tecnológico para echarnos una mano en lo relacionado con la economía circular. IRBin es un contenedor de reciclaje interactivo que habla con el usuario para indicarle dónde va cada residuo; RoCycle, desarrollado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), dispone de unos sensores avanzados para identificar el material del que están hechos los objetos que pasan por una cinta mecánica y así optimizar la fase de separado; y Daisy, desarrollado por Apple, está diseñado para abrir dispositivos electrónicos.

 

Cada una de estas herramientas que integran la robótica y el reciclaje está pensado para un momento distinto en el proceso. Los hay especializados en la clasificación, que utilizan sensores y cámaras para identificar y separar materiales reciclables, como RoCycle, en la recolección de residuos, como IRBin y en el desmontaje de productos electrónicos, como Daisy.

Es el caso de los residuos de aparatos electrónicos y eléctricos (RAEE). Se producen mundialmente más de 50 millones de toneladas de esta basura al año, de la que se recicla solo un 20%. Según la Organización de Naciones Unidas (ONU) este tipo de residuos superarán los 74 millones de toneladas en 2030.

En estos casos, la robótica industrial se torna imprescindible en el reciclaje, no solo por la precisión y la optimización, sino por el bien de los trabajadores: los químicos añadidos que se manipulan en el desmontaje se liberan al medio ambiente y son muy nocivos para la salud humana.

 

Así que, para recuperar el 90% de los materiales contenidos en los móviles que, según Recyclia, son reutilizables, se necesita de tecnología como la de Daisy, el robot de Apple que nombramos al principio. Su diseño concreto permite extraer de los móviles de la compañía los materiales aluminio, cobalto o litio, con capacidad de desmontar 200 iPhone por hora: un teléfono cada 20 segundos

La incorporación de la robótica industrial en el reciclaje no es solo una promesa futurista, sino una realidad palpable que está transformando nuestra capacidad para gestionar desechos de manera sostenible y eficiente. Este avance tecnológico nos permite enfrentar con mayor precisión los retos ambientales de nuestro tiempo, mejorando significativamente las tasas de reciclaje y contribuyendo a la preservación de los recursos naturales.

 

Fuentes:

Hablando en vidrio, “Robótica, la nueva R que se suma al reciclaje en la economía circular” 20 de noviembre de 2024, consultado en: https://hablandoenvidrio.com/robotica-reciclaje/ 

Mexico Industry, “La revolución de la robótica integrada en la economia circular y la fabricación del futuro” 27 de septiembre de 2024, consultado en: 

https://mexicoindustry.com/noticia/la-revolucion-de-la-robotica-integrada-en-la-economia-circular-y-la-fabricacion-del-futuro 

The Food Tech, “Robótica: aliada de la economía circular” 28 de febrero de 2023, consultado en: https://thefoodtech.com/seguridad-alimentaria/robotica-aliada-de-la-economia-circular/